Tal y como estaba anunciado, todos los amigos de Lemmy, el líder de Motörhead, lo despidieran el sábado 9 de enero en Los Ángeles. Primero hubo una ceremonia íntima en el Forest Lawn Memorial en Hollywood y luego en el Rainbow Bar & Grill, el bar que solía frecuentar la estrella. La despedida como estaba anunciado se retransmitió por internet. Asistieron viejos amigos como Dave Grohl de Foo Fighters, Slash de Guns N’ Roses, Lars Ulrich de Metallica, y Rob Halford de Judas Priest, entre otros.
Durante todo el día numerosos aficionados fueron pasando para recordar al músico, también estuvo ahí Paul Kilmister, el hijo de Lemmy, que explicó como le había tocado el gordo por ser hijo de quien era y dijo algunas cosas curiosas, como el cantante amaba a Abba y los Bee Gees. Además de a Peter Cook y Dudley Moore. Nacido para perder, vivir para ganar. Cuando alguien no tiene nada que perder, sus opciones son limitadas, dijo el hijo de Lemmy.
Lemmy Kilmister murió el 28 de diciembre de un cáncer, sumamente agresivo, que le fue diagnosticado solo dos días antes.
