Se veía venir, desde que Rusia anunció su representante para Eurovisión se venía barruntando esta posibilidad y ha sucedido. Ucrania ha prohibido la entrada a la cantante rusa en el Festival de Eurovisión por haber actuado en Crimea, la península que Rusia se anexionó en 2014. El Servicio de Seguridad de Ucrania ha informado que la cantante Julia Samoylova tiene prohibida la entrada al país durante tres años. Esto no dejaría a la cantante poder participar en el próximo Festival de Eurovisión que se celebrará el 13 de mayo en Kiev, Ucrania.
Ucrania señala que la cantante entró ilegalemente en el país cuando participó en un concierto en Crimea. Julia Samoylova, elegida por la televisión rusa para participar en el certamen, está en silla de ruedas por una atrofia muscular espinal.
Es la primera vez que sucede un veto de estas características en los más de 60 años de historia del Festival. El Kremlin ha dejado claro que no buscará sustituto. Las autoridades rusas han calificado la acción como escandalosa y pretenden recurrirla incluso ante la ONU y el Consejo de Europa.
La Unión Europea de Radiodifusión, la UER, ha dejado en manos de Ucrania la decisión, y no se involucrará en las leyes del país. En realidad los problemas comenzaron hace un año, cuando la cantante ucraniana Jamala ganó el Festival, que se celebró en mayo de 2016 en Estocolmo. Su triunfo por delante del representante ruso, provocó una indignación en las autoridades rusas, que vieron aquello como un triunfo político.
La canción con la que Jamala actuó, 1944, tenía como hilo, la brutal deportación de los tártaros de Crimea ordenada en aquella fecha, por Stalin. La delegación rusa protestó, al entender que el tema violaba la norma que impide cualquier referencia política en las canciones participantes, algo que finalmente la dirección del concurso rechazó.
Quedan menos de dos meses para el Festival, pero todo apunta que Rusia, podría no participar en Eurovisión, por primera vez desde 1999.
