Un informe detallado del iPhone 6S y 6S plus

A primera vista la nueva generación de iPhones, el 6S y el 6S Plus, no se distingue de las anteriores, pero Apple ha introducido muchos cambios, entre los que destaca la sensibilidad táctil 3D como nuevo concepto y una excelente cámara de fotos. La empresa promociona de hecho los nuevos modelos con la frase: «Lo único que ha cambiado es todo«. Suena contradictorio, pero tiene su núcleo de verdad.

La forma es la misma, pero Apple utiliza una aleación más dura en ambos modelosAluminium 7000«), que se aplica en la actualidad en la industria aeronáutica y espacial. No deberían volver a aparecer historias sobre iPhones doblados. El 6S Plus es a causa de ello un poco más pesado, 192 en vez de 172 gramos. El 6S pasa de 127 a 143 gramos.

También la pantalla contribuye al aumento de peso. El tamaño y la resolución son los mismos, pero una capa sobre ella reconoce ahora la fuerza con la que se presiona. Apple bautizó esta tecnología como «3D Touch» (toque 3D). Si se aprieta con más fuerza sobre un símbolo o una zona de texto se habilita una nueva función. En el caso de las aplicaciones aparece un menú de contexto con las funciones más utilizadas. En la cámara, un toque fuerte habilita el modo selfie.

Esta forma rápida de comando se puede usar en casi todas las aplicaciones de Apple. En la de fotos, por ejemplo, lleva de forma directa a las imágenes nuevas, en el mail se muestran más rápido que antes los mensajes de los contactos VIP y en el caso de los mapas se muestra la navegación a casa.

Otra novedad es la función «peek and pop» (algo así como «mirar y abrir«). Por ejemplo, en la aplicación de email, con «peek» se pueden ver los correos con una suave presión. Con otros gestos de arrastrar el dedo sobre la pantalla los mensajes se reenvían, se marcan como leídos o se borran. Con una presión más fuerte del dedo («pop«), se abren.

Los teléfonos llevan además un nuevo procesador, el A9, que es un 70 por ciento más rápido que el anterior. A nivel de gráficos Apple señala que el rendimiento ha subido un 90 por ciento.

En la práctica cotidiana el cambio se nota sobre todo al abrir las aplicaciones, proceso que va el doble de rápido que hasta ahora. El chip A9 lleva integrado el coprocesador M9, que antes iba separado. Con este diseño se baja el consumo de energía. Por eso es posible tener activada al asistente Siri de forma constante sin necesidad de tener el smartphone enchufado.

Otro gran paso adelante de los dos modelos son las cámaras. La principal pasa a 12 megapíxeles (frente a los 8 anteriores), y en la de selfie a 5 (en vez de 1,2).

Hay teléfonos de otras marcas que tienen más píxeles, pero éstos no son la única forma de medir la calidad. La nueva cámara del iPhone convence por sus fotos nítidas y detalladas, colores naturales y mejor rendimiento con menos luz. El 6S Plus tiene incluso estabilizador de imágenes óptico, lo que hace que las fotos no salgan movidas y permite más tiempo de exposición en caso de menos luz. Otra novedad es la función «Live Photo«, por la que se graban mini vídeos de tres segundos cuando se toma una foto.

La duración de la batería es similar a la del iPhone 6. En la prueba, el 6S aguantó más de 11 horas ininterrumpidas de reproducción de video o 12 horas navegando por WiFi -una más incluso de lo que promete Apple-. El modelo Plus duró unas 13 horas navegando.

En resumen, se puede decir que tanto el 3D Touch, como las cámaras mejoradas son dos buenos motivos para cambiar al 6S o al 6S Plus. Pero eso sí, hay que pagar un precio. El 6S con una memoria de 16 GB cuesta 739 euros, y con 64 GB vale 110 euros más. Si se quiere tener 128 GB de espacio, el valor vuelve a subir otros 110 euros. El iPhone 6S Plus cuesta de por sí en cada modelo 110 euros más (849, 959 y 1.069 euros).

Dpa