La cantante Beyoncé ha pedido un minuto de silencio, el jueves noche en el concierto que daba en Glasgow dentro de su Formation Tour, por la muerte a manos de la policía de Alton Sterling y Philando Castile. La cantante proyectó en el concierto el nombre de docenas de víctimas incluyendo las dos últimas, Alton Sterling de 37 años y Philando Castile de 32, que fueron abatidos por disparos hechos por la policía, el primero en Baton Rouge, Louisiana y el segundo en Falcon Heights, Minnesota.
La cantante anteriormente había escrito en las redes, Estamos cansados y asqueados de las muertes de hombres y mujeres jóvenes, en nuestras comunidades, depende de nosotros el levantarnos y pedir que dejen de matarnos. Mientras rezamos por las familias de Alton Sterling y Philando Castile, también rezamos porque termine esta plaga de injusticia en nuestras comunidades.
La cantante ha querido unirse a los numerosos mensajes de artistas como Drake, Josh Groban, Ne-Yo o John Legend, que han condenado este sinsentido.
Porque la violenta muerte de dos hombres negros a manos de la policía en tan solo dos días en los Estados Unidos, que han sido grabadas con teléfonos móviles, han encendido de nuevo las protestas y agravado la herida racial del país y la desconfianza de las minorías con las fuerzas policiales.
Castile, un afroamericano de 32 años de Falcon Heights, falleció la noche del miércoles abatido por los disparos efectuados por un agente de policía que lo había detenido porque su vehículo tenía un faro trasero roto. En el vídeo, que su novia transmitió en directo, se le ve agonizar mientras el policía sigue apuntando su pistola y la mujer relata lo que está pasando. El día antes, Alton Sterling, un hombre de 37 años que vendía CDs delante de un supermercado en Baton Rouge, Louisiana, murió a manos de dos agentes que le dispararon cuando ya había sido reducido, también grabado con cámaras.
Las dos muertes han causado tanto impacto, por cómo se han producido que el gobernador de Minnesota, Mark Dayton llamó al jefe de Gabinete de la Casa Blanca, Dennis McDonough, para solicitarle que el Departamento de Justicia abra una investigación federal independiente sobre la muerte de Castile, tal como ha hecho también en el caso de Sterling.
En el caso de Castile, el gobernador Dayton admitió ante la prensa, que veía indicios racistas en el caso e incluso comentó que si la persona detenida hubiera sido blanca, creía que habría acabado de distinta manera.
Vinilo Negro
