No esperábamos este debut de Natalia Lacunza, no esperábamos este estilo, que no ha tocado en su paso por OT 2018, y sin embargo no podemos dejar de aplaudir el lanzar una primera canción, sencilla, directa y emocionante, pero sobre todo alejada de cualquier atisbo de comercialidad, pero que te llena.
Siempre dijimos que la Natalia de la Academia, a veces era como un robot de lo perfecta que era, pero en Nana triste, junto a Guitarricadelafuente, es una cantante que se rompe, que se abre y el vídeo se rompe de lo sencillo que es, pero además dentro de esa sencillez, encontramos toda una diversidad de expresiones, matices y gestos impresionantes de Natalia. Si se pasa el vídeo fotograma a fotograma, plano a plano, es magnífico.
Hemos de reconocer que no hemos seguido a Guitarricadelafuente, pero que bien dobla su voz con la de Natalia, y qué complicidad muestra con ella.
Aplaudimos como decimos el estilo y el riesgo de lanzar esta canción, llena de sentimiento, intensidad y delicadeza, y un último apunte, letra fantástica con este final A ti te maldigo y a tus lágrimas de sal, a ti te maldigo, no me vas a hacer llorar, a ti te maldigo, porque a un niño que no es mío, nunca lo debí cuidar, nunca lo debí cuidar, nunca lo debí cuidar, nunca lo debí cuidar.
